Estamos viviendo profundas transformaciones en el mundo, mismas que han alcanzado a nuestro país, ciudad y hasta el acceso a la justicia, es por ello por lo que estoy convencida que debemos realizar acciones que nos ayuden a transformar y mejorar esta nueva normalidad, logrando recuperar la confianza de la ciudadanía y, sobre todo, recuperar la paz y tranquilidad que hemos perdido estos últimos años.

Trabajaré por tener un poder judicial unido, pero sobre todo fuerte desde su interior para que la justicia imparcial sea una realidad para cualquier persona, especialmente para aquellas que se encuentran en una situación de vulnerabilidad.

Es muy importante que toda la población recupere la confianza en nuestra institución, que tengan la certeza que todas las mujeres y hombres que integramos el Poder Judicial de la CDMX cumpliremos con nuestro deber de manera justa, honesta e imparcial, teniendo como pilares la impartición de justicia abierta y con perspectiva de género.